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No es un secreto que a fin de año el famoso “recalentado” es un platillo recurrente, necesario y buscado por muchos, ya que si lo haces de la manera adecuada obtendrás incluso mejor sabor que el platillo inicial.
Lo primero y más importante a considerar para garantizar un buen recalentado de Navidad y Año Nuevo es la adecuada conservación de la comida, algo que se logra a través de una adecuada refrigeración. Para esto es importante que antes de almacenar los sobrantes de la cena verifiques la temperatura de tu refrigerador, ya que esta debe ser de máximo 2°C y mínimo de 8°C.
Entonces sácale provecho a los sabores del recalentado con estos tips de Ciemsa Food Service:
Hay platillos que son a base de aderezos, cremas o algún otro de lácteos que, si están durante mucho tiempo a temperatura ambiente pueden generarse bacterias peligrosas. Por lo que se recomienda, enfriarlos en caso de que vayan a ser recalentados.
Los mariscos, sobre todo en ciertas regiones del país suelen servirse frescos, aunque también hay platillos que pasan por el fuego, lo recomendable es ingerirlos al momento.
Finalmente, algunas verduras son parte importante de la cocina mexicana, lo ideal consumirlas frescas. Aunque hay alimentos guisados, algunas verduras pierden sus nutrientes luego de un par de cocciones.